Todos sabemos como la tecnología cambió nuestra
vida en los últimos años. Casi ninguna
actividad que hacemos los seres humanos se sigue haciendo de la misma manera
que hace, por ejemplo, 30 años atrás. La informática, internet, el
abaratamiento y la masividad de la tecnología revolucionaron todos los aspectos
de nuestras vidas. Todos, excepto uno: la política.
Cuando los griegos pensaron la democracia imaginaron
un sistema en el que todos los considerados ciudadanos podían participar de
manera directa y con un voto en la creación de las leyes de la ciudad. Pero
cuando nacieron los países y las repúblicas de la edad moderna, el tamaño de la
población hizo imposible implementar el sistema griego. Nacieron las
democracias representativas, los congresos, los diputados; nació el sistema que
todas las democracias actuales usan para crear y aprobar leyes.
Pero la tecnología y los sistemas informativos nos
devolvieron la posibilidad de tener una democracia directa como los griegos
imaginaron. Una democracia en donde los ciudadanos no tengan representantes (que
muchas veces defienden sus intereses económicos y políticos propios), una
democracia en donde cada ciudadano sea dueño de su propio voto y pueda votar
directamente todas las leyes. La tecnología hace posible la creación de un
ágora digital gigante en donde todos los ciudadanos pueden votar directamente,
a través de internet, todo lo que hoy se vota en un congreso.
- Cuando hay una propuesta de ley los ciudadanos tienen cierta cantidad de días para observar y participar, si lo desean, de un debate online. Al final de este debate se fija un día en el que la ley será votada. El día de la votación será como el día de una elección pero sin salir de tu casa y haciendo nada más que un click. En la misma página se podrán encontrar el detalle de la ley que se está votando y los argumentos a favor y en contra de la propuesta.
- Los ciudadanos tienen la obligación de votar en al menos cierto porcentaje de las propuestas de ley que se hacen.
- Los ciudadanos tienen la posibilidad de delegar automáticamente su voto a otras personas de confianza que consideren que están más preparadas. Por ejemplo, si hay una propuesta de salud y tengo un tío que es médico, le puedo delegar mis votos relativos a temas de salud y el voto de mi tío va a contar por el mismo y por todas las personas que le deleguen su voto.
- Se pueden delegar votos por una sola vez. Se puede tener muchos delegados diferentes para diferentes áreas y se puede cambiar, eliminar o hacer una excepción por única vez hasta el día antes de la votación.
- Ninguna persona puede ser delegado de más de X número de personas para evitar que se creen punteros políticos digitales que compren votos.
- La persona que delega su sufragio puede conocer aquello que votó su delegado para estar informado. El delegado puede por este motivado rechazar la posibilidad de ser delegado de las personas que quiera.
- Los congresos y legislaturas seguirían existiendo. Es necesario que existan personas que se dediquen tiempo completo a la política. Si bien pierden su principal poder, votar leyes, es fundamental que existan estos espacios que, ya sin las presiones políticas de votar a favor o en contra de cierta ley, van a ser el centro del debate de las leyes y van a servir como vidriera para políticos que busquen ocupar cargos ejecutivos.
- Los diputados y senadores mantendrían muchos de los poderes que hoy tienen: Proponer proyectos de ley que vayan directamente a la votación online, servir como control del poder ejecutivo, y ocuparse de votaciones específicas: hacer juicios políticos, nombrar jueces, etc.
Para poder llevar a
la práctica este sistema se necesitan muchas condiciones. Habría que contar con
un sistema informático que sea muy seguro y prácticamente invulnerable. También
sería necesario que todas las personas tengan acceso a una computadora y que
entiendan el sistema. Por otro lado existen otras condiciones sociales que se
tienen que cumplir bien para que esto se dé (probablemente en Noruega se
implemente un sistema como este antes que acá). Y seguro que hay muchos
detalles que no se me ocurrieron y estoy olvidando.
Hoy en día ponemos
los nombres de personas en un sobre para que nos representen y muchas veces no
sabemos quiénes son ni que es lo hacen. Y eso no es muy democrático. Porque
democracia es participar de la vida pública de un país; y votar una vez cada
dos años no me parece muy participativo. No creo que el sistema actual no sea
democrático, pero sí que tiene mucho por mejorar y que no se corresponde con
los tiempos de hoy.
(Varias de las ideas
de este post son las que busca impulsar el Partido de la Red en la Argentina y
en todo el mundo. Cualquier cosa entrá a www.democraciaenred.org)